Alejandro Durán y señora con niñas de la Casa Hogar |
Papá Durán, como le dicen las niñas y continúan diciéndole incluso aquellas que pasaron por esa Institución hace algunos años cuando se lo encuentran en algún lugar, aseguró que «las caritas de felicidad» dan muestra de la fortaleza de la Casa Hogar donde reciben además el cariño, respeto y apoyo emocional que las fortalece para su futura función como mujeres formadoras de las nuevas generaciones
Por: Sergio Rojas
La Casa Hogar de las Niñas de Tláhuac cumplió 20 años de labor ininterrumpida de atención y servicio a pequeñas desamparadas o de familias de escasos recursos, a pesar de las «piedritas en el camino» que de vez en cuando algunos se empeñan en poner, señaló el presidente del Patronato de esa noble institución, Alejandro Durán Raña, quien hoy recibió tal vez la visita más numerosa en las dos décadas de funcionamiento con motivo de la tradicional primera comunión de 19 pequeñas durante la misa que ofició el obispo Andrés Vargas Peña, en las instalaciones de Avenida Piraña número 5, en la Colonia del Mar.
Ante amigos, compañeros, empresarios y líderes de opinión de sus comunidades, entre los que se encontraba el jefe delegacional en Tláhuac, Rubén Escamilla, el empresario reconoció que la Casa Hogar no sería posible sin la sinergia de un conjunto de grupos, personas e instituciones cuyos esfuerzos y voluntades se concretan en el bienestar que todos los que estuvieron en la ceremonia pudieron constatar en «las caritas de felicidad» que muestran las niñas de la Casa Hogar.
Obispo Andrés Vargas Peña al momento de la confirmación |
Durán Raña aseguró que a pesar de los obstáculos que ocasionalmente le ponen a la Casa Hogar algunos a quienes les molesta el apoyo desinteresado que ahí se brinda a quienes más lo necesitan, los integrantes del Patronato, tanto personal directivo como operativo, ponen su mejor empeño por librar situaciones que «de repente nos ponen a prueba», porque precisamente las dificultades son las que los han hecho perdurar en su misión y celebrar ahora 20 años de fructífera labor.
Para poder continuar por otros muchos años más, dijo, el también dirigente de los empresarios de Tláhuac invitó a todos los representantes sociales ahí reunidos, entre los que se contaron dirigentes y significativos militantes de diversos partidos políticos, a «divulgar nuestra obra entre sus familiares, amigos y conocidos, a fin de que la Institución perdure más allá de quienes la fundamos y para que, quienes nos releven en el futuro, se queden con una institución fortalecida por su gran cantidad de amigos, profesionalizada por la preparación y compromiso de su personal, sana y transparente en su manejo de recursos, y feliz y satisfecha por ver cumplida su labor».
Esa labor, precisó, «es la de contribuir con el desarrollo integral y ejercicio de los derechos humanos a que todo ciudadano mexicano debe acceder en nuestra Carta Magna».
Porque estas niñas, indicó, reciben además el cariño, respeto y apoyo emocional que las fortalece para su futura función como mujeres formadoras de las nuevas generaciones.
Quien por más de cuatro décadas se ha significado por su altruista labor en Tláhuac, agradeció la presencia en la Casa Hogar de representantes de la Junta de Asistencia Privada del Distrito Federal, de monseñor Andrés Vargas Peña, obispo de la Octava Vicaría con sede en Xochimilco, de la Congregación Misioneras de Cristo Rey y Santa María de Guadalupe (cuyas monjas se encargan del cuidado y educación de las niñas), de distintas organizaciones de la sociedad civil y de personas donantes que han hecho posible que esa Institución tenga nuevo rostro gracias a su generosidad: el Nacional Monte de Piedad, la Fundación Luz Saviñón, el Fondo Privado de Socorros José María Olloqui, la Fundación Becar, Ayúdate a Dar, AC; académicos de la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia de la UNAM; personal de Laboratorios Avi-Mex, SA de CV, y a los padrinos y familiares de las niñas que hoy hicieron su primera comunión.
Las niñas de la primera comunión con Papá Durán |
Entre los presentes estuvieron también integrantes del Grupo Social Tláhuac, agrupación de la que también es presidente Alejandro Durán Raña, y que desde hace un año realizan diversas acciones orientadas al desarrollo social, económico y cultural de numeras comunidades de esa demarcación, en cuya sede de Avenida Ferrocarril Atlixco y Calle Blas Corral, Barrio de La Asunción, se ofrece gratuitamente los servicios de gestión social, regularización escolar, consultas médicas, asesoría jurídica y en trámites de construcción, e incluso se obsequia a quien por su precaria condición económica no puede adquirirlo, féretros para sepultar algún familiar.
La Casa Hogar de las Niñas de Tláhuac IAP fue constituida en 1990. Tiene como misión brindar a las niñas de escasos recursos, entre los seis y 13 años, huérfanas totales o parciales (en la modalidad de casa hogar o de internado), servicio asistencial integral que les permita recuperar su estabilidad emocional para que puedan ser útiles a sí mismas y a la sociedad.
El modelo de atención incluye alojamiento, alimentación, educación primaria, atención médica y psicológica, así como actividades recreativas y culturales.
Durante su trayectoria se han realizado diversos cambios a las instalaciones para la mejora del servicio. En 1991 fue construido un dormitorio adicional para 16 niñas, lo que permitió aumentar el número de la población atendida.
En febrero de 2008 se concluyó la construcción de seis nuevas aulas de concreto para sustituir a las prefabricadas. Posteriormente, en octubre de ese año dio inicio la construcción de cuatro nuevos dormitorios, con lo que la cobertura del servicio aumentó a 96 niñas.